Intervención con adultos

 Todos en alguna ocasión hemos sufrido malestar psicológico o emocional: tristeza, inseguridad, tensiones familiares y laborales, insatisfacción, fatiga, insomnio, nerviosismo, angustia,…

 Cuando este malestar es de gran intensidad o persiste en el tiempo, entonces ha llegado el momento de pedir ayuda a un profesional.

Tomar la decisión de acudir a la consulta del psicólogo no resulta fácil para nadie. Implica aceptar que tenemos un problema y que necesitamos ayuda. Sin embargo, los problemas forman parte de la vida y ser ayudados no es algo de lo que sentirse avergonzado. Lo importante es avanzar y disfrutar de aquello que vivimos en cada momento.

El psicólogo no solo nos ayudara a afrontar los problemas, sino a conocer y desarrollar nuestros recursos para poder hacer frente a las dificultades de la vida.

Áreas de trabajo con adultos:

  • Burn-out. 
  • Depresión.
  • Miedos: a volar, a los espacios cerrados (claustrofobia), a hablar en público (fobia social), a salir a la calle (agorafobia), a los animales, etc.
  • Trastornos psicosomáticos.
  • Trastorno por Estrés Post-traumático.
  • Traumas y bloqueos (ver EMDR).
  • Adicciones.
  • Aislamiento social, timidez, dificultades para hacer y mantener amigos, falta de habilidades sociales.
  • Inseguridad, indecisión, baja autoestima.
  • Alteraciones del sueño.
  • Apoyo psicológico en rupturas sentimentales.
  • Etc.